La reciente elección judicial en México estuvo marcada por la difusión de "acordeones" ilegales, folletos repartidos de forma física y digital que sugerían por quién votar en las boletas.
Estos materiales coincidieron por completo con los resultados oficiales dados a conocer por el Instituto Nacional Electoral (INE), lo que ha levantado diversas dudas sobre la legitimidad del proceso y el impacto de esta propaganda anticipada.
En el caso de las cinco candidatas a la Suprema Corte promovidas en los panfletos (Lenia Batres, Yasmín Esquivel, Sara Irene Herrerías, Loreta Ortiz y Estela Ríos) todas resultaron elegidas. Las cinco coincidieron con los números 03, 08, 16, 22 y 26, recomendados en los acordeones. Las aspirantes destacaron entre 33 mujeres que competían por un lugar en la Corte.
Lo mismo ocurrió con los cuatro candidatos varones a la Suprema Corte. Hugo Aguilar, Irving Espinoza, Giovanni Figueroa y Arístides Guerrero, quienes fueron promovidos con los números 34, 41, 43 y 48, también ganaron la elección. En ambos casos, la coincidencia entre lo sugerido en los folletos y los resultados es del 100%.
Para la Sala Superior del Tribunal Electoral, los nombres de Claudia Valle y Gilberto Bátiz, sugeridos en los panfletos con los números 6 y 7, también resultaron electos. En el Tribunal de Disciplina Judicial, de los cinco candidatos sugeridos en los volantes, todos ganaron su lugar, incluyendo a Eva De Gyves, Celia Maya y Bernardo Bátiz, entre otros.
En otros espacios judiciales donde aún no ha concluido el conteo de votos, como las magistraturas de circuito, la Sala Regional y las juezas y jueces de distrito, también se identificaron nombres y números en los folletos, aunque aún no se ha confirmado si también habrá coincidencia total.
El reparto de estos acordeones fue reportado en distintas partes del país y circuló a través de redes sociales, aplicaciones de mensajería e incluso de forma impresa. Hasta el momento, no se ha informado de alguna sanción oficial o investigación abierta sobre este tipo de propaganda electoral anticipada.
Aunque no está prohibido orientar el voto, la coincidencia total entre los nombres sugeridos y los ganadores ha generado críticas por la falta de autonomía en el proceso y por la posible manipulación de la voluntad ciudadana en una elección que se anunciaba como histórica por ser de participación directa.