El circuito de Imola, uno de los trazados más emblemáticos de la Fórmula 1, no solo destaca por su historia y dificultad técnica, sino también por los distintos nombres que ha adoptado a lo largo de los años.
Este fin de semana, la Fórmula 1 celebrará la ronda 7 de la temporada en el histórico circuito de Enzo e Dino Ferrari, ubicado en Imola, Italia. Con 75 años de historia, este trazado ha sido testigo de momentos memorables, y a lo largo de su existencia ha adoptado cuatro nombres distintos en el calendario oficial del campeonato.
Considerado uno de los circuitos más emblemáticos del "Gran Circo", Imola es recordado cada año por el trágico Gran Premio de 1994. Aquel fin de semana quedó marcado por las muertes del piloto austriaco Roland Ratzenberger y del brasileño Ayrton Senna. Este último perdió la vida en la curva Tamburello, lo que llevó a la FIA a declarar el sector como altamente peligroso y a ordenar modificaciones en el trazado para mejorar la seguridad.
En 1980, debido a las remodelaciones en Monza, el Gran Premio de Italia se trasladó a Imola, que por única ocasión albergó la carrera con ese nombre. Un año después, y hasta 2006, la competencia pasó a llamarse Gran Premio de San Marino, ya que el reglamento de la F1 no permite tener dos carreras con el mismo nombre dentro de un mismo país. Aunque nunca se corrió en el microestado, la cercanía geográfica permitió utilizar su denominación para mantener dos fechas en suelo italiano.
Tras desaparecer del calendario en 2007, Imola regresó de manera sorpresiva en 2020, impulsado por la pandemia de COVID-19 y la consecuente cancelación de varios grandes premios. Desde entonces, el evento se disputa bajo el nombre de Gran Premio de Emilia-Romaña, en honor a la región donde se encuentra el circuito, una denominación que se mantiene vigente hasta la actualidad.