El gobierno de México informó que ante las extorsiones que sufren los productores de cítricos en Michoacán, se reforzará la seguridad. Esto ocurre tras el reciente asesinato de Bernardo Bravo, líder limonero.

Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSC) informó en una reunión con autoridades locales, en el municipio de Apatzingán, que "por instrucción de la presidenta, Claudia Sheinbaum, y con el objetivo de disminuir actos ilícitos contra del sector citrícola en el estado" se acordó aumentar y reforzar las labores de inteligencia en ese estado.

Sobre el homicidio del líder limonero, dijo que continúan las investigaciones y que el asesinato "no quedará impune".
A Bernardo Bravo se le conocía por encabezar en los últimos meses manifestaciones ante a las extorsiones del crimen organizado contra el sector limonero, y denunciar que él y sus compañeros estaban "permanentemente secuestrados" por las cuotas que les exigía de su cosecha.
Las autoridades hicieron un llamado a la ciudadanía para que denuncien cualquier tipo de acto delictivo a través del número de teléfono 089, una línea "anónima y segura que no expone la identidad de las víctimas ni de quienes aporten información útil para las investigaciones".
En la reunión también estuvieron presentes, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla; representantes del sector limonero y autoridades de la Fiscalía General y de la Secretaría de Seguridad Pública estatales.