Incluso con los recientes cambios de jueces y rotaciones en el personal judicial, la situación no ha mejorado de manera sustancial.
En Colima persiste una grave problemática en la impartición de justicia familiar, la tardanza en los juicios que las mujeres promueven para garantizar la pensión alimenticia de sus hijas e hijos.
A pesar de tratarse de un derecho fundamental, estos procesos pueden prolongarse durante meses sin una resolución ni medidas efectivas que obliguen al padre a cumplir con sus obligaciones básicas.
"Y comencé con el proceso de demanda sí ha sido un poquito tardado porque pasó aproximadamente un mes y medio y a la fecha de hoy es día que no tengo información concreta de parte de la abogada".
Incluso con los recientes cambios de jueces y rotaciones en el personal judicial, la situación no ha mejorado de manera sustancial.
Otra situación es la falta de organización, lo que obliga a las madres a acudir una y otra vez a las instalaciones judiciales, perdiendo tiempo, recursos y energía en trámites que deberían ser ágiles.
"Piden primero unos documentos y me piden ir, o sea me pidieron ir, y después llevar otros documentos en otra fecha y volver a ir, entonces para mí fue un poquito confuso porque considero yo que pues sí pude haber llevado los documentos en primer momento en cuanto yo acudí a pedir información".
La lentitud en estos juicios no solo representa una falla institucional, sino que coloca a las y los menores en una situación de vulnerabilidad.
"Sí he pasado en situación de mi proceso donde llegan otras personas y las atienden o así nada más sin un turno se podría decir y pues hay más personas esperando, considero que sí las personas encargadas deberían de tener un orden en ese tipo de cosas".
De acuerdo con la organización feminista Somos Equis, es urgente combatir la desinformación y los mitos en torno a la labor en los procesos de juicios de mujeres, y que sea el propio Poder Judicial quien lo haga.