En Michoacán, la capacidad de captación de agua de las presas ha disminuido en los últimos 10 años.
La deforestación es una de las principales causas.
"Los afluentes ya traen más lodos procedentes de la cuenca alta debido al corte de bosque, cambio de uso de suelo y deforestación en general. (...) "Entonces la presa ha recibido más lodos de lo que realmente tenía programado en su momento", señaló Arturo Cchacón especialista de la Universidad Michoacána de San Nicolás de Hidalgo.
Las 22 presas de Michoacán tienen una capacidad máxima de 2 mil 383 hectólitros, es decir más de 2 billones de litros de agua, sin embargo, al mes de abril solo se encuentran abastecidas al 64 por ciento, es decir 1 mil 531 hectólitros.
En 2020 Michoacán contaba con una capacidad máxima de 2 mil 358 hectólitros y un abastecimiento al mes de abril de 1 mil 535 hectólitros.
"Tenemos que reforestar las cuencas, el manejo de cuencas es reforestar, claro nos vamos a llevar 20, 30 años en que están reforestadas, pero mientras nos vamos a trabajar en lo que tenemos, poder llevar más agua al lago con estos recursos que tenemos de aguas residuales", apuntó Roberto Arias, comisionado Nacional del Agua en Michoacán.
En 2015 la capacidad máxima era de 1 mil 686 hectólitros, y contaba con 1 mil 387 hectólitros en abril, 82 por ciento de la capacidad total, en 10 años ha disminuido 18% el abastecimiento en las presas en Michoacán
Se busca contrarrestar la falta de agua con la rehabilitación de los acuíferos del estado, a través de reforestaciones y la rehabilitación de plantas tratadoras de agua; de las 43 en Michoacán el 60% se encuentran fuera de función.
"Tenemos que estar preparados para una sequía también, todavía no está resuelto el problema de cambio climático y también de la variabilidad climática, que se manifiesta con a veces con tormentas, a veces con prolongadas sequías", apuntó Arturo Chacón.
En Michoacán se cuenta con 10 acuíferos que surten de agua no solo a Michoacán, también al Estado y Ciudad de México como la que se extrae de Zitácuaro en la presa El Bosque.
Por ello, es necesaria la reforestación en estos cuerpos de agua.
"No hay quien pare la deforestación, por siembra de aguacates, por siembra de frutillas, por siembra ahora de agave para el mezcal y nadie hace por remediar las partes altas de la cuenca que es dónde realmente está el problema", comentó Vicente Estrada, Presidente del COnsejo Estatal de Ecología.
"La reforestación sobretodo de especies de gran tamaño permite mantener la humedad, generar humedad y al mismo tiempo disminuir la temperatura frente a los procesos de variabilidad climática y cambio climático", apuntó Arturo Chacón.
Sumado a esto, se realizan operativos en contra del robo de agua como en el Lago de Pátzcuaro.