En Michoacán la violencia en contra de la mujer persiste, siendo el cuarto estado con más homicidios dolosos del país .
De enero a junio se registraron 72 homicidios de mujeres, siendo la cuarta entidad con más casos debajo de Guanajuato con 201, baja california con 103 victimas y Estado de México con 92.
"lo que establece la ley y la sentencia de la Suprema Corte de la Nación, que toda muerte violenta de una mujer tiene que ser investigada con el protocolo de feminicidio, es el llamado que hacemos al nuevo fiscal", señaló la diputada Fabiola Alanís.
Mientras Michoacán concentra el 6.2 por ciento de los casos de homicidios dolosos, se encuentra en el noveno lugar en feminicidios con 15 victimas este 2025.
En primer lugar, se encuentra Estado de México con 33 víctimas y en último lugar Zacatecas con 1 solo caso.
"Que toda muerte violenta de una mujer sea investigada como feminicidio y ya en el transcurso de la investigación se defina si se tiene que reclasificar el delito", añadió la diputada.
"Las instituciones siguen revictimizando, siguen violentando a las mujeres que van a denunciar y hay que entender que el feminicidio como es su máxima expresión pasó por un montón de violencias que están previas y que en muchas se intentó hacer una denuncia", declaró Verónica Loayza, integrante de la Red Colectivas Feministas.
Lo que impacta directamente en el acceso a la justicia y la visibilización de la violencia feminicida.
El año 2022 ha sido uno de los que más feminicidios se han registrado con un total de 45. 2023 y 2024 se registran 17 y 18 casos respectivamente.
Aunado al cambio de protocolos, también se busca incrementar las sanciones en Michoacán a los culpables de feminicidio.
"Incrementar la pena mínima de 25 a 40 y la máxima a 60, con agravante en el caso de que se tratara de una víctima con discapacidad, adulto mayor o un menor de edad", indicó la diputada Fabiola Alanís.
Sin embargo, también son necesarias acciones desde la educación para prevenir estos actos.
"Hay que hablar también de una cuestión de prevención estructural que tiene que ver con una educación que es una educación con perspectiva de género y una educación también basada en el feminismo", finalizó Verónica Loayza.
Por ello, aunado a este incremento en las penas, también se busca el cambio en los protocolos de investigación.