Entre 2020 y 2024, el mundo vivió un aumento en los precios de los alimentos solo comparable con la crisis de los años setenta
Así lo advierte Máximo Torero, economista jefe de la FAO, durante la presentación del adelanto del informe Estado de la seguridad alimentaria y nutrición en el mundo (SOFI 2025).
Esta alza fue provocada por una combinación de choques globales que siguen afectando a millones de personas.
¿Qué causó esta crisis alimentaria?
El resultado fue una inflación alimentaria global que alcanzó un pico del 13.6 % en enero de 2023, superando el 30 % en países con bajos ingresos
Consecuencias para millones de familias
El aumento de precios coincidió con una caída del 0.9 % en los salarios reales globales en 2022. Esto redujo el poder adquisitivo de los hogares, que tuvieron que adaptar su alimentación:
Por cada aumento del 10 % en los precios, la inseguridad alimentaria moderada o grave aumentó un 3.5 %, mientras que la inseguridad grave creció un 1.8 %.
Además, la emaciación infantil -una forma grave de desnutrición- aumentó entre 2.7 % y 6.1 %, afectando el desarrollo y salud pública
Aunque el informe no da datos específicos sobre México, la realidad nacional refleja esos retos: inflación en alimentos, dependencia de importaciones y fenómenos climáticos que afectan la producción local, impactando el acceso a alimentos para millones.