El secretario de Gobierno del Estado de Querétaro, Eric Gudiño, confirmó que la licencia de conducir será retirada de manera permanente únicamente en casos de reincidencia o situaciones especiales en los que el conductor haya manejado bajo los efectos del alcohol. Esta medida forma parte de un endurecimiento en los controles viales tras incidentes recientes que han generado fuerte rechazo social. Gudiño detalló que este tipo de sanciones no serán aplicadas en casos aislados, sino que se reservan para quienes cometan una segunda falta grave o circunstancias excepcionales que pongan en riesgo la seguridad pública.
La iniciativa para establecer estas penas más severas ya está siendo analizada por la Dirección Jurídica en coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana, y se espera que las modificaciones normativas se anuncien pronto. Esta decisión refleja una política de "cero tolerancia" hacia conductores que reinciden en infringir la ley bajo influencia, en un esfuerzo por prevenir accidentes fatales y garantizar una mayor protección vial. Organismos civiles y autoridades han señalado la necesidad de sanciones ejemplares para disuadir esta conducta.