La Cancha del Árbol es uno de los espacios más emblemáticos de Salamanca. Más allá de ser un centro deportivo, representa un símbolo de identidad y memoria colectiva para generaciones de salmantinos. Su historia está profundamente ligada a las raíces religiosas, culturales y sociales de la ciudad.
La Cancha del Árbol, oficialmente conocida como Centro Recreativo y Deportivo Fray Camilo Montes Vega, es un emblemático espacio en el centro histórico de Salamanca, Guanajuato. Su historia se remonta al siglo XVIII, cuando los frailes agustinos establecieron una huerta en los terrenos del Convento de San Agustín. En esta huerta, plantaron un laurel de la India que, con el tiempo, se convirtió en un árbol monumental, alcanzando aproximadamente 24 metros de altura y 26 metros de diámetro en su copa.
Tras la exclaustración de los frailes en 1859, el terreno permaneció sin uso definido durante décadas. Fue hasta 1950, con la llegada de trabajadores petroleros, que el espacio se transformó en un centro deportivo, conocido popularmente como la Cancha del Árbol. Este lugar albergó canchas de básquetbol, voleibol y frontenis, convirtiéndose en un punto de encuentro para la comunidad.
El laurel de la India sufrió daños significativos durante la inundación de 1958, conocida como el "Chifón de San Juan", debido a las aguas contaminadas del Río Lerma. Aunque el árbol comenzó a deteriorarse, no fue talado hasta 1972. A pesar de su desaparición, retoños del árbol original fueron plantados en diversos jardines de la ciudad, como el Jardín Principal y el Jardín Bellavista, preservando su legado. En 1991, el recinto fue nombrado oficialmente Centro Recreativo y Deportivo Fray Camilo Montes Vega, en honor al fraile agustino que promovió la conservación del arte religioso en Salamanca.
Hoy en día, la Cancha del Árbol continúa siendo un espacio vital para actividades deportivas y culturales, incluyendo clases de baile urbano y presentaciones artísticas, manteniendo viva la memoria de su histórico laurel y su importancia en la vida comunitaria de Salamanca.