El presidente nacional Coparmex, Juan José Sierra Álvarez afirmó durante una conferencia de prensa en Tepic que el sector empresarial está a favor de reducir la jornada laboral a 40 horas, siempre que la reforma se aplique de manera flexible, gradual y con excepciones para micro y pequeñas empresas; recalcó que el cambio debe acompañarse de periodos de adaptación por sector para evitar impactos en la operación y el empleo.
El dirigente señaló que las grandes compañías ya se han preparado e incluso han probado esquemas de 40 horas desde 2024, pero las MiPyME "no están listas" y requieren tiempos diferenciados; por ello, propuso que la reforma contemple etapas de implementación y reglas específicas por giro, construidas en mesas de diálogo y foros con autoridades laborales y organizaciones empresariales.
Aclaró que Coparmex no se opone a mejorar las condiciones de los trabajadores, pero advirtió que un ajuste brusco podría empujar a negocios a la informalidad y deteriorar sus finanzas; para mitigar ese riesgo, instó a complementar la reforma con incentivos a la productividad y a la formalización, incluida la deducibilidad de prestaciones laborales que el sector ha solicitado "desde hace años".
Añadió que, en las conversaciones con el gobierno, se ha planteado que la reducción tenga "flexibilidad y gradualidad", así como excepciones claras para micro y pequeñas empresas conforme a su número de trabajadores y capacidad operativa; recordó que a nivel federal se ha mencionado un horizonte de transición de hasta 13 años, por lo que pidió "escuchar de verdad a los sectores" y aterrizar una ruta realista.
Finalmente, subrayó que el diálogo social debe traducirse en acuerdos operativos y calendarios cumplibles, con el objetivo de que la jornada de 40 horas mejore el bienestar laboral sin frenar la actividad económica ni la creación de empleos.