La ola de violencia que se vive en la zona sur del Estado de México mantiene preocupados a empresarios mexiquenses ya que esto podría afectar a los municipios de corte turístico tal es el caso de Valle Bravo, Ixtapan de la Sal y Tonatico a donde llegan cientos de personas.
Para el caso de las inversiones el Estado de México también se podría ver afectado, ya que para algunas empresas venir a sentarse a territorio mexiquense podría ser sinónimo de inseguridad y extorsión.
En algunos casos, los negocios ubicados en dichos municipios han tenido que bajar cortina ya que no han podido cubrir el derecho de piso que les exigen.
Si bien el último enfrentamiento registrado en Texcaltitlán entre fuerzas de seguridad y grupos delictivos causó miedo entre pobladores y comerciantes, también aplaudieron las acciones que llevan a cabo dependencias cómo Fiscalía mexiquense, SEDENA y MARINA para erradicar a las células delictivas que mantienen el poder en la zona sur de la entidad mexiquense.