El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) de Estados Unidos llevó a cabo una de las redadas más grandes en la historia de Luisiana, arrestando a 84 migrantes en el hipódromo Delta Downs Racetrack, ubicado en Vinton, un pequeño pueblo cercano a la frontera con Texas
Esta operación, realizada el martes y anunciada oficialmente el día de hoy, 18 de junio, contó con la colaboración de diversas agencias, entre ellas la Patrulla Fronteriza, la policía estatal, el FBI y la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF).
El objetivo principal del operativo fue identificar a personas que laboran de manera irregular en el sector dedicado a la cría y competición de caballos de pura sangre y cuarto de milla, así como a los empleados encargados del cuidado de estos animales.
Además de las detenciones por violaciones migratorias, las autoridades investigan posibles delitos relacionados con la explotación laboral y la contratación ilegal de trabajadores sin documentos.
Entre los detenidos, se encuentran dos ciudadanos mexicanos con antecedentes penales
El primero, Enrique González Moreno, de 36 años, había ingresado al país en cuatro ocasiones sin autorización y poseía condenas previas por conducir bajo los efectos de sustancias, posesión de cocaína y reingreso ilegal.
El segundo detenido, de 40 años y cuya identidad no fue divulgada, tiene antecedentes por conspiración criminal, agresión agravada con arma, agresión sexual y grabación ilícita de videos.
El resto de los migrantes arrestados aún está en proceso de identificación y sus nacionalidades no han sido confirmadas. Todos enfrentan cargos por infracciones administrativas relacionadas con las leyes migratorias y fueron trasladados a la estación de la Patrulla Fronteriza en Lake Charles, Luisiana.
La Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) está profundizando en las pesquisas para determinar si, además de las violaciones migratorias, existen otros delitos como fraude documental, lavado de dinero o trata de personas
Eric DeLaune, agente especial a cargo de ICE HSI en Nueva Orleans, indicó que este tipo de operativos frecuentemente destapan otras formas de criminalidad, incluyendo el uso de documentos falsos y la explotación de personas en situaciones vulnerables.
Aunque recientemente se ha planteado la posibilidad de flexibilizar estas acciones para no afectar sectores clave como la construcción, la hotelería y la restauración, las autoridades han mantenido la presión sobre empleadores y trabajadores en situación irregular.
Luisiana es uno de los estados, junto con Texas y Florida, donde el gobierno federal ha desplegado a cientos de efectivos militares para reforzar los operativos migratorios, según datos proporcionados por el Pentágono esta semana.