La imposición de nuevos impuestos a productos como refrescos, tabaco, alcohol y videojuegos, así como el incremento de los existentes, es una estrategia del gobierno mexicano para generar ingresos y, al mismo tiempo, desincentivar el consumo de bienes considerados dañinos para la salud.
Para el ejercicio fiscal de 2026, el Paquete Económico presentado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) propone una serie de ajustes en el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que impactarán significativamente tanto la economía como la salud pública. Empresarios señalan que generará un impacto económico en las empresas?
"Son impuestos en efecto. pues tienden a que van a tener una repercusión en importante en el tema recaudatorio. Se espera un aumento significativo". expuso Arturo Blanco Hernández, presidente de Coparmex.
El principal impacto económico de estos impuestos se ve en la recaudación fiscal. Se estima que para 2026 alcanzará los 5.8 billones de pesos, siendo el IEPS sobre productos como el tabaco y los refrescos una de las partidas más importantes.
La propuesta fiscal busca aumentar la recaudación para financiar el gasto social y fortalecer el sistema de salud.
"Lo que decíamos que no se tome tanta bebida azucarada para proteger la salud, en caso de que haya ingresos adicionales están etiquetados a salud".
Empresarios señalan que podría afectar a las empresas menos posicionadas en el mercado, ya que los consumidores podrían preferir marcas líderes si la diferencia de precio se reduce.
No obstante, más allá del fin recaudatorio, estos impuestos se justifican como "impuestos saludables" con el objetivo de proteger la salud física y mental de la población.
¿Qué opina la gente al respecto? ¿Dejará de consumir estos productos?
El gobierno ha señalado que la eficacia de la medida para reducir el consumo aún es objeto de debate, ya que la demanda de estos productos ha demostrado ser poco factible, es decir, que la gente está dispuesta a pagar más en lugar de reducir su consumo.