Luego de que el policía Vidal Brígido Guzmán fue asesinado en un retén la noche del pasado 14 de septiembre y ante la violencia imparable que se vive en Michoacán, el presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, dijo que está dispuesto a levantarse en armas con los ciudadanos si las autoridades no hacen nada.
El funcionario hizo un llamado a las autoridades federales para que detengan a los delincuentes responsables del homicidio, advirtió que si eso no se hace la única opción que queda es tomar acciones, "aunque eso implique tomar las propias armas ante el vació institucional del federalismo".
El alcalde dijo que no se trata de pandillas, si no de cárteles muy poderosos que son los principales generadores de violencia en la región.
También aseguró que se tienen ubicadas fosas clandestinas y algunos perfiles delincuenciales, información que se pondrá a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) para que realice las investigaciones.