Esta mañana, la presidenta Claudia Sheinbaum volvió a poner en duda quiénes están detrás de la marcha convocada por la Generación Z para el próximo 15 de noviembre, la cual se realizará en la Ciudad de México y en otros puntos del país.
Durante su conferencia matutina, la mandataria adelantó que en las próximas horas su gobierno llevará a cabo un análisis sobre el origen y la organización de esta movilización, que (según dijo) podría tener "tintes partidistas".
"Todos tienen derecho a manifestarse. Nadie está en contra de las marchas. Somos un país libre, con libertad de expresión, de reunión y de movilización. Pero es importante que se conozca quiénes están convocando esta movilización", declaró.

Sheinbaum subrayó que, aunque la protesta se presenta como una iniciativa de la Generación Z (jóvenes de entre 13 y 27 años), se ha detectado la participación de personas mayores que también han difundido e impulsado la convocatoria.
"La marcha... no sé si hoy o mañana haremos un análisis de cómo se ha convocado. Creemos en la libertad de manifestación, pero hemos visto que hay algunos mayores de edad, que no necesariamente pertenecen a esta generación, que están promoviendo la movilización", añadió.
En redes sociales, la postura de la presidenta ha generado críticas de usuarios que acusan al gobierno de intentar desacreditar o intervenir en una protesta ciudadana. Algunos de los comentarios más compartidos señalan:
"Mejor ponte a investigar tantos homicidios, robos y extorsiones; por eso la gente va a manifestarse."
"Dice que investigará cuentas por promover la marcha de la Generación Z. Parece que la libertad ya no le gusta tanto..."
"Que mejor se ponga a investigar a los criminales."

Vuelve a desprestigiar la marcha
Recordemos que la mandataria afirmó en su conferencia mañanera, del 3 de noviembre que dicha movilización no tiene nada que ver con una protesta genuina, y acusó de intereses políticos.
"Vamos a ver cuáles son las cuentas que la promueven, porque no surgió de los jóvenes, sino de los mismos de siempre", declaró.
La presidenta aseguró que la movilización no es un esfuerzo ciudadano legítimo, sino parte de una campaña coordinada desde redes sociales para desacreditar al movimiento que representa.
La primera mandataria explicó que instruyó una revisión de cuentas y flujos económicos relacionados con la promoción digital de la marcha, ya que, dijo, hay "muchísimo dinero involucrado en levantar mentiras y tendencias artificiales".
"Hay grupos que se dicen apartidistas, pero están vinculados al conservadurismo más extremo. Buscan confundir y generar un ambiente de descontento con base en falsedades", subrayó.
La marcha del 15 de noviembre ha sido promovida principalmente a través de plataformas digitales y busca, según sus organizadores, expresar el descontento de jóvenes frente a distintas problemáticas sociales y políticas del país.