Más de la mitad de las extorsiones en México vienen desde prisión
CDMX
Fecha: 11-11-2025
En México, buena parte de las llamadas que buscan engañar o intimidar a la gente no provienen de la calle, sino de detrás de los muros de prisión. Según datos del Gobierno federal, más de la mitad de las líneas telefónicas denunciadas por extorsión salen de solo 12 penales del país, aunque no se mencionó cuáles
El hallazgo no es menor: 56% de las llamadas reportadas al número 089 se rastrean a esos centros penitenciarios, donde los teléfonos móviles siguen circulando pese a operativos y revisiones.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) inició en julio una estrategia nacional para frenar las extorsiones, encabezada por el titular Omar García Harfuch.
Desde entonces, se han reportado 2,389 números telefónicos usados para este delito, y un tercio de ellos ya fueron bloqueados gracias al trabajo conjunto con las compañías de telefonía.
Las primeras acciones incluyeron el bloqueo de antenas cercanas a los penales de Altamira y Matamoros, Tamaulipas, así como la suspensión total de servicios 3G y 4G en Santa Marta Acatitla, en la Ciudad de México. El objetivo es sencillo pero urgente: cortar la señal a los celulares que siguen operando dentro de las cárceles, de acuerdo a las autoridades
Revisión constante
Como parte de la estrategia, las autoridades han realizado 730 revisiones en los 275 centros penitenciarios del país, donde se han asegurado teléfonos, chips, drogas y armas de distinto tipo.
En los centros federales de máxima seguridad, las inspecciones superan las 4 600, con decomisos similares.
La SSPC asegura que el aumento de las denuncias también ha sido clave. En lo que va del año, la línea 089 ha recibido más de 83 800 llamadas relacionadas con extorsiones, y de acuerdo con las cifras oficiales, el 75 % de los intentos no se consumaron gracias a que las víctimas colgaron o alertaron a las autoridades.
Aun así, uno de cada diez casos sí terminó en delito consumado
El seguimiento de los reportes ha permitido abrir 2 929 carpetas de investigación y detener a 478 personas ligadas a las redes de extorsión.
Las cifras muestran avances, pero también un problema estructural: las cárceles siguen siendo centros de operación del crimen, incluso cuando sus puertas están cerradas.
