Integrantes Defensores del Medio Ambiente y Recursos del Mañana (DEMAREM) así como la comunidad de Armería y Cuyutlán mostraron su preocupación por la inminente amenaza de ecocidio y etnocidio del proyecto portuario Nuevo Manzanillo.
El megaproyecto denominado "Desarrollo del Puerto Nuevo Manzanillo, en el vaso II de la Laguna de Cuyutlán, Colima" pone en riesgo la laguna, uno de los humedales más importantes del pacifico, y con ello, las actividades que sostienen la vida comunitaria, la pesca, producción salinera, la agricultura y el turismo local.
La asociación ambientalista solicita a las autoridades de los tres órdenes de gobierno, que no aprueben obras, ordenamientos territoriales ni cambios de uso de suelo sin consulta previa, libre e informada a las comunidades y colectivos afectados. Consulta realizada debidamente con un censo de personas no solo residentes sino afectadas por este megaproyecto, como el colectivo de salineros, y no a mano alzada y sin representatividad real como acostumbran las autoridades.
Exigen se realice un estudio ambiental riguroso y coherente, con participación de especialistas y ciudadanía. No una simulación como lo han hecho hasta la fecha.
Y que se concrete la declaratoria de Área Natural Protegida de los vasos III y IV de la Laguna de Cuyutlán y del Estero Palo Verde, ecosistemas esenciales para Colima y cuya protección ya impulsa la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) pero no define.
El proyecto fue anunciado el pasado 23 de noviembre del 2024 por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum y que perfila colocar a Colima como un referente logístico internacional con capacidad proyectada para manejar más de 10 millones de TEU´s (contenedores) anualmente.