Con 218 votos a favor y 214 en contra, el Congreso estadounidense, de mayoría republicana, aprobó este jueves el megaproyecto de ley presupuestaria de Donald Trump, que incluye fondos para su política migratoria, impuesto a las remesas, exenciones fiscales y recortes a la cobertura médica.
El plan fiscal fue denominado por el presidente de Estados Unidos como el "gran y hermoso proyecto de ley" y tiene previsto firmarlo este viernes 4 de julio para conmemorar el Día de la Independencia.
¿En qué consiste?
Impuesto del 1% a las remesas que envían los migrantes a sus familias en el extranjero a partir del 31 de diciembre de 2025.
Debe pagarlo el titular de la transferencia. No se aplicará si el dinero procede de una cuenta bancaria en Estados Unidos o se realiza con una tarjeta de crédito o débito emitida en el país.
Extiende y amplía los recortes de impuestos de 2017, incluidos beneficios para trabajadores (propinas, horas extras) y la deducción SALT (pasando de $10000 a hasta $40000 por declaración conjunta).
Elimina créditos fiscales para energías renovables creados por la Ley de Reducción de la Inflación.
El proyecto de ley proporciona 350 mil millones de dólares para la defensa y la aplicación de las medidas migratorias. (ICE, muro fronterizo y detenciones).
El gobierno contempla gastar 150 mil millones de dólares para la seguridad fronteriza y operaciones de deportación. Pretende destinar 46 mil 500 millones para ampliar el muro en la frontera con México e infraestructura y tecnología para la vigilancia fronteriza, como caminos, iluminación, cámaras y sensores, entre otros. El presupuesto incluye 32 mil millones para ampliar las operaciones de la policía migratoria (ICE); destina 7 mil millones para contratar a más agentes de la patrulla fronteriza, personal de aduanas, agentes aéreos y marítimos y personal de apoyo y otros 3 mil 300 millones para contratar jueces de inmigración.
Plantea asignar 45 mil millones para construir y operar centros de detención, transporte de personas deportadas y 5 mil millones para renovar instalaciones fronterizas. El proyecto permitiría detener a familias migrantes por tiempo indefinido.
La Oficina de Presupuesto del Congreso proyecta un aumento del déficit de más de 3 billones de dólares para 2034. Para contrarrestarlo, los republicanos proponen recortes a Medicaid, el programa de seguro médico para personas de bajos ingresos, así como al programa SNAP de ayuda alimentaria y a los incentivos para energías renovables.
Reducción de Medicaid en más de $1billón, con nuevas exigencias de trabajo, verificación y exclusiones (cobertura trans, ONG proaborto, no ciudadanos legales).
Recortes en SNAP (cupones de comida), modificaciones en límites del plan básico de alimentos, nuevas condiciones laborales.
Implementación de requisitos para trabajo, tarifas de co-pago y controles más estrictos en ambas áreas.
El líder demócrata de la Cámara, Hakeem Jeffries calificó el presupuesto como una vergüenza, al señalar que los recortes en el gasto de Medicaid harán que muchos estadunidenses pierdan la vida debido a que no pueden acceder a la cobertura de atención médica.