Con globos blancos, pancartas y veladoras, familiares, docentes y estudiantes rindieron un emotivo homenaje a Alexa, de 7 años, y Leidy, de 11, en la escuela primaria Rafael Ramírez, donde ambas cursaban sus estudios.
Durante el acto, las maestras de 6° "A" y 1° "B" realizaron un simbólico último pase de lista, pronunciando los nombres de las menores, lo que conmovió a toda la comunidad escolar.
Posteriormente, al grito de "¡Fuera Rocha!" "¡Con los niños no!", y "¡Militares asesinos! realizaron una manifestación en la que tomaron el bulevar Enrique Cabrera y se plantaron frente al plantel para exigir justicia por el crimen ocurrido en la sierra de Badiraguato.
La protesta se desarrolló de manera pacífica, con la presencia de decenas de personas vestidas de blanco en señal de luto.
Noé, tío de las niñas, afirmó que no se trató de un enfrentamiento, sino de un ataque directo perpetrado por elementos del Ejército y que pedían justicia por sus sobrinas y que pagara quien tuviera que pagar.
Por su parte, Orlando Gastélum, asesor técnico de la Supervisión Escolar, lamentó profundamente los hechos y aseguró que sucesos como este no deberían repetirse.
Durante la manifestación, el desgarrador llanto de la madre de Leidy resonó entre los presentes, reflejando el dolor de una familia destrozada por la violencia que azota a Sinaloa.