Por primera vez en más de 50 años de historia, la Universidad Autónoma de Occidente (UAdeO) enfrenta una huelga de hambre como forma de protesta. Gerardo Quezada López, empleado con 14 años de servicio en el área de Servicios Generales en la Unidad Regional Guasave, inició esta medida tras denunciar que fue despedido de manera ilegal y sin justificación.
Según el trabajador, su separación ocurrió sin previo aviso, sin documentación legal y por órdenes presuntamente emitidas desde Culiacán. Asegura que su despido responde a su postura crítica hacia la administración del rector Pedro Flores Leal, lo cual considera una violación a su derecho a la libertad de expresión. La protesta arrancó la mañana del sábado 21 de junio, frente a las instalaciones de la unidad.
Quezada no solo reclama el despido arbitrario, sino también el incumplimiento de su pago quincenal y del bono por el Día del Padre. Al presentarse en la universidad para solicitar explicaciones, afirma que únicamente le notificaron verbalmente su separación sin entregarle documento alguno, lo que ?según él? contraviene lo establecido en el artículo 47 de la Ley Federal del Trabajo.
En solidaridad, la maestra universitaria Ixchel Zazueta se unió a la huelga, exigiendo la reinstalación inmediata de Quezada y denunciando una vulneración a los derechos humanos y laborales. Este hecho ha comenzado a generar preocupación en la comunidad universitaria, al tratarse de una situación inédita en la historia de la UAdeO.