Ribereños bloquean acceso a canal de navegación

Se armaron de valor, pescadores ribereños tomaron las pangas no para salir a pescar sino para manifestarse bloqueando el acceso al canal de navegación por donde cruzan embarcaciones camaroneras para llegar a tierra o bien salir a alta mar. 

Sin embargo, los ribereños aseguran tener una urgencia: la de pescar para sobrevivir durante esta pandemia. 

Y es que los ribereños quieren realizar capturas de dorado, aunque dicha especie está no se puede pescar a excepciones y son esas excepciones las que molestan a los pangueros. 

El problema es que casi 500 familias viven económicamente de la pesca.

 "Por embarcación vamos tres pescadores y son tres familias. Somos más de 200 pangas la que vamos a pescar pero no todas pues el gasto de gasolina es bastante. Sin van 150 embarcaciones son 450 familias le batallan para sacar el "pan de cada día", dijo Julio César González, pescador ribereño.

En las aguas mexicanas la pesca y comercialización del pez dorado está prohibida pero solamente en la imaginación pues dicha especie marina se vende en todas las pescaderías del país. 

Sin embargo, la Ley estipula que para la práctica de la pesca deportiva según el artículo 68 de la Ley General de Pesca. 

Pero los pescadores ribereños de las cooperativas de Mazatlán aseguran que dicha especie va de paso durante esta época de frío debido a las corrientes marinas que permiten la travesía del dorado por aguas sinaloenses. 

Aunque los pescadores han explicado a Conapesca el paso de esta especie marina migrante, aún así no se les permite pescarla.

"Y también hemos llevado estudios de que el pescado es altamente migratorio no es que uno se lo acabe. Busca aguas más calidas. Cuando entran aguas frías el dorado migra. Lamentablemente los altos poderes no quieren liberar la pesca del dorado. A ellos les conviene que sea una pesca deportiva y que venga gente extranjera a divertirse a que le den permiso al sector ribereño para comercializarlo" comentó el pescador ribereño.