La mañana de este lunes, decenas de familiares y amigos de ocho jóvenes víctimas de desaparición forzada se manifestaron en Culiacán con una marcha que partió de las escalinatas de la Catedral y concluyó en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado.
Vestidos de blanco, con fichas de búsqueda en mano y al grito de consignas como "¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!" y "¡No se llevaron maleantes, se llevaron estudiantes!", los manifestantes recorrieron la avenida Álvaro Obregón, cruzaron el puente Miguel Hidalgo y descendieron por el Malecón Nuevo.
Entre los asistentes estuvo la familia de Paúl Antonio Jacobo Benítez, de 22 años, desaparecido desde el 30 de marzo en la colonia Los Huertos. Su madre, Yodeli Benítez, expresó que su hijo tiene diagnóstico de autismo y que su única rutina era trabajar: "Solo queremos que aparezca con vida".
También se exigió justicia por Ricardo Verdugo Lechuga, de 22 años, y Rámses Bastidas Arreola, de 16, quienes desaparecieron el 28 de abril. Según sus familiares, ambos fueron privados de la libertad por elementos de la Policía Municipal en la plazuela de la sindicatura de Aguaruto.
Otros casos presentes en la marcha fueron los de David Antonio, de 21 años, y José Isaías, de 23, estudiantes de aviación originarios de Costa Rica, quienes desaparecieron el 31 de marzo. De acuerdo con testimonios, ambos fueron "levantados" por hombres armados afuera de su escuela.
Asimismo, se unieron a la movilización los familiares de Óscar Darian de 16 años, desaparecido el 18 de enero. Además también estuvo presente la familia de Addiel Gerardo de 19 años, desaparecido el 3 de octubre y la familia de Benjamín un joven23 años, desaparecido el 17 de octubre.
Cabe resaltar que estos casos forman parte de una serie de desapariciones forzadas ocurridas desde el estallido de violencia registrado en Culiacán, el pasado 9 de septiembre.