Este domingo, Antonio Ochoa Rodríguez rindió protesta como presidente municipal de Durango para el periodo 2025-2028. La ceremonia solemne se realizó en la antigua Estación del Ferrocarril, espacio habilitado para la sesión en la que también asumieron funciones los nuevos integrantes del Cabildo.
El acto contó con la presencia del gobernador Esteban Villegas Villarreal, funcionarios de los tres niveles de gobierno, representantes de cámaras empresariales, invitados especiales y ciudadanos que acudieron al evento. La sesión marcó el inicio formal de la administración municipal que encabezará Ochoa durante los próximos tres años.
En su toma de protesta, el nuevo alcalde refrendó su compromiso de trabajar en coordinación con el Gobierno del Estado y la Federación para atender los principales retos de la capital. Subrayó que su administración pondrá especial atención en servicios públicos, infraestructura urbana, seguridad y programas sociales dirigidos a grupos vulnerables.
El Cabildo quedó integrado por regidores y síndicos de distintas fuerzas políticas, lo que refleja un escenario plural en la toma de decisiones municipales. En ese sentido, Ochoa Rodríguez llamó a la unidad y a privilegiar el diálogo como mecanismo para impulsar proyectos que respondan a las necesidades de la población.
La antigua Estación del Ferrocarril, sede del acto protocolario, fue elegida como símbolo del desarrollo y la historia de Durango. Ahí, el alcalde reiteró que la gestión municipal buscará vincular tradición y modernidad, con el objetivo de consolidar a la capital como un punto estratégico en el norte del país.
La ceremonia concluyó con la instalación formal del nuevo Ayuntamiento, que a partir de este lunes comenzará funciones administrativas y de atención ciudadana. Entre los primeros pasos de la nueva gestión se contempla una evaluación de los programas en operación y la definición de prioridades para el presupuesto del próximo año.
Con la toma de protesta de Antonio Ochoa, inicia un nuevo periodo en el gobierno municipal de Durango, en el que se espera coordinación con otros niveles de gobierno y la participación de distintos sectores sociales en la definición de políticas públicas.