Durante la presente temporada de calor y floración, autoridades de salud han reportado un incremento en enfermedades respiratorias y alérgicas en la población infantil de Durango, especialmente en padecimientos como rinitis, rinofaringitis, bronquitis y bronquiolitis. El aumento de polvo, tierra y polen en el ambiente está directamente relacionado con el repunte de estos casos, según confirmó Alejandro Villarreal Martínez, encargado de la Dirección del Hospital Municipal 460.
Las condiciones ambientales actuales generan reacciones en niñas y niños con antecedentes de asma o alergias, lo que ha llevado incluso a que algunas escuelas cierren temporalmente aulas o grupos completos como medida preventiva. Aunque enfermedades como la bronquiolitis no son contagiosas, pueden confundirse fácilmente con infecciones respiratorias más graves, lo que provoca preocupación entre padres de familia.
Villarreal Martínez aclaró que muchas de estas afecciones no requieren tratamiento con antibióticos, a pesar de que los síntomas incluyan fiebre, congestión nasal o estornudos. Subrayó la importancia de evitar la automedicación y de acudir a los servicios de salud para obtener un diagnóstico correcto. "Hay que educar a la población: no todas las enfermedades respiratorias se curan con antibióticos. Algunas son alérgicas y deben tratarse de forma diferente", señaló.
Indicó que, en general, si el menor presenta buen estado general, come bien y solo tiene síntomas como mucosidad o fiebre leve, podría tratarse de un cuadro alérgico. En cambio, las infecciones respiratorias agudas suelen presentar fiebre más persistente y durar menos días.
Las autoridades municipales recomiendan a la ciudadanía acudir a los centros de salud, brigadas médicas o al Hospital Municipal del Niño ante la aparición de síntomas respiratorios, para evitar complicaciones y recibir atención oportuna.
