Cambio climático desfasó calendario agrícola
Los ciclos agrícolas tradicionales en Durango han dejado de existir. Las siembras ya no se rigen por fechas fijas, sino por el momento en que llegan las lluvias. La incertidumbre climática ha obligado a los productores a cambiar de estrategia para no perder sus cosechas.
"Antes hablábamos de sembrar del 1 al 15 de julio. Hoy sembramos cuando llueve, cuando el terreno está listo. Ya no podemos guiarnos por lo que funcionaba hace años", declaró Jesús López Morales, titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (SAGDR), durante el arranque del programa estatal de entrega de semilla subsidiada de frijol y avena.
La declaración se dio en Pánuco de Coronado, donde el gobernador Esteban Villegas encabezó el inicio formal del programa, que en los próximos días recorrerá municipios clave como Guadalupe Victoria, Cuencamé, Canatlán, Nombre de Dios y Poanas.
El funcionario señaló que las semillas entregadas ya están tratadas para prevenir plagas y fortalecer el desarrollo de raíces, lo que permite a los cultivos adaptarse mejor a la variabilidad de la lluvia. El objetivo, dijo, es que las plantas aprovechen al máximo la humedad disponible en el suelo.
Pero el problema va más allá de la semilla. Productores del estado han insistido en la necesidad de contar con créditos accesibles y garantías de comercialización al final del ciclo agrícola. Frente a ello, López Morales respaldó la propuesta de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, para activar líneas de crédito a través de FIRA, con condiciones adaptadas a la situación del campo.
También llamó a una mayor coordinación entre el Gobierno estatal, la Federación y el Congreso local para establecer esquemas de comercialización que eviten pérdidas económicas en el sector rural.
"Que lo que siembren, lo puedan vender. Esa debe ser la prioridad", afirmó López Morales, al subrayar que sin certidumbre para colocar el producto, los apoyos y programas no tienen el efecto esperado.
