El cierre de negocios continúa generando despidos y reducciones de personal, especialmente en comercios pequeños y restaurantes, dos de los sectores más afectados por la falta de circulante y el incremento de costos operativos. De acuerdo con reportes empresariales, al menos 15 comercios han cerrado sus puertas este año en la capital, mientras que la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) confirmó el cierre de 11 restaurantes en lo que va de 2025 y advirtió que seis más podrían bajar la cortina antes de finalizar el año.
Aunque no existe una cifra oficial de despidos, las cámaras empresariales estiman que cada restaurante pequeño emplea entre 5 y 10 personas, mientras que los comercios minoristas suelen tener entre 3 y 6 trabajadores. Con base en esos rangos, los cierres ya ocurridos en la capital significan una pérdida estimada de entre 130 y 240 empleos, cifra que podría aumentar hasta 300 puestos si se concretan los cierres proyectados antes de diciembre.
Comerciantes señalan que factores como la baja en ventas, el alza en obligaciones patronales y la falta de liquidez han debilitado la operación de pequeños establecimientos. Restauranteros, por su parte, reconocen que varios negocios operan con márgenes mínimos y analizan más recortes de personal para mantenerse abiertos.
Organismos empresariales advierten que, de no aplicarse apoyos emergentes, estímulos temporales o programas de recuperación económica, Durango podría enfrentar uno de los cierres más altos de unidades económicas de los últimos años, con un impacto directo en el empleo formal.