Habitantes del poblado 16 de Septiembre, en el municipio de Durango, denunciaron una grave crisis de agua que se ha prolongado durante semanas, a pesar de contar ya con una planta solar lista para operar. La situación ha escalado al punto de considerar una queja formal ante la Comisión de Derechos Humanos, al señalar que se les está negando el acceso a un recurso vital.
José Ramiro Meléndez, uno de los voceros de la comunidad, explicó que la planta solar diseñada para abastecer de agua a la población ya está completamente instalada, pero no ha sido puesta en operación debido a que las autoridades responsables no han firmado el contrato correspondiente. "Ya solo falta la firma del contrato, no es un problema técnico. La planta está lista, pero no la echan a andar. Esto ya es desesperante", declaró.
Actualmente, los habitantes sobreviven con el suministro de dos pipas semanales proporcionadas por el gobierno municipal. Sin embargo, la semana pasada solo recibieron una, lo que agravó la escasez. "Necesitamos mínimo dos pipas por semana. La situación está muy difícil, no hay agua ni para lo básico", añadió Meléndez.
El problema se ha intensificado con el reciente agotamiento del manantial "El Senegal", fuente natural de agua que durante años abasteció a la comunidad. "Nunca se había secado, pero este año ya no da ni una gota", lamentó.
Ante este panorama, los pobladores han solicitado la intervención urgente de las autoridades estatales y federales para resolver la firma del contrato que permitiría operar la planta solar. "No podemos seguir esperando decisiones burocráticas mientras nuestras familias sufren. El agua no es un lujo, es un derecho", concluyó Meléndez.
Los habitantes no descartan manifestaciones o acciones legales si la situación no se resuelve en los próximos días.