En un hecho poco común, los comerciantes del centro histórico de Durango decidieron no cerrar las calles para la celebración del Día de las Madres este 10 de mayo, debido a las bajas ventas y la falta de afluencia de personas en la zona. Así lo confirmó Lourdes Macías Rodríguez, presidenta de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (CANACOPE), quien señaló que la decisión se tomó en conjunto entre los locatarios.
"Para este 10 de mayo hemos decidido no cerrar las calles por este año, por las bajas ventas que hay. No ha habido movimiento, entonces los comerciantes decidimos no hacer nada para este día. Ha estado muy mal, no hay circulación, la gente está comprando solamente lo básico, como comida, y eso nos ha afectado muchísimo", explicó Macías Rodríguez.
De acuerdo con la presidenta de CANACOPE, muchos locatarios han tenido que cerrar sus negocios ante la falta de ventas, y aunque algunos intentaron organizar alguna actividad para impulsar el comercio, la respuesta ha sido mínima. "Varios compañeros han dejado sus locales porque no hay ventas. Apenas estamos tratando de levantar un poco con las salidas escolares, pero ha sido muy difícil", añadió.
A pesar de este panorama, los comerciantes no pierden la esperanza de mejorar sus condiciones. Macías Rodríguez adelantó que se planea organizar otro evento comercial más adelante, posiblemente en fechas cercanas a las salidas escolares, para lo cual buscarán cerrar nuevamente la calle Patoni, entre 5 de Febrero y Suárez, y solicitarán los permisos correspondientes.
"Vamos a tratar de hacer otro movimiento, pedir el permiso para otro día y ver si levantamos un poco la venta. Esperamos que la gente aproveche y nos visite en cada local", concluyó.
La situación refleja el difícil momento que atraviesa el comercio local, que, además de enfrentar competencia con grandes cadenas, ahora se enfrenta a una reducción importante del consumo, en una temporada que tradicionalmente representaba un respiro económico para muchos comerciantes.