En el país hay indignación ante tanta violencia, tanto asesinato, tantito río de sangre, secuestro y desapariciones, sostuvo el arzobispo de Durango, Faustino Armendáriz al ser abordado por el panorama de inseguridad que priva en el país y que cobra una víctima más con el asesinato del alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo.
Al concluir la misa que ofició este domingo en el Panteón de Oriente en la capital de Durango con motivo del Día de los Fieles Difuntos, el religioso consideró que hay mucha fe del pueblo y ojalá que no se pierda la esperanza.
Sobre la celebración de este domingo, hizo el llamado a los feligreses a rezar este día por los fieles difuntos, y regalarles la Santa misa para que sea un camino y puedan llegar al cielo.