Este jueves dieron inicio en toda la Arquidiócesis de Durango las celebraciones del Jueves Santo, una de las fechas más importantes dentro de la Semana Santa, que marca el comienzo del Triduo Pascual. A partir de las 5:00 p.m., diversos templos comenzaron con las celebraciones litúrgicas que reúnen a cientos de fieles en un ambiente de recogimiento y fe.
Con la misa vespertina de la Cena del Señor y el tradicional lavatorio de pies, los católicos rememoran el acto de amor y servicio de Jesús hacia sus discípulos durante la Última Cena. En este rito, los sacerdotes lavan los pies a doce personas de la comunidad, recordando la humildad de Cristo antes de su pasión.
Además, las iglesias han dispuesto espacios especiales para la adoración al Santísimo Sacramento, que permanecerá expuesto durante la noche, invitando a la comunidad a acompañar a Jesús en oración, recordando su agonía en el Huerto de los Olivos.
Grupos juveniles, familias y comunidades enteras participan activamente en estas celebraciones, reforzando su compromiso con la fe. Algunas parroquias han organizado momentos de reflexión, representaciones y actividades complementarias para ayudar a los asistentes a profundizar en el mensaje espiritual del Jueves Santo.
Con esta jornada, la comunidad católica de Durango se adentra en los días más solemnes de la Semana Santa, que continuarán con el Viacrucis y la adoración de la cruz el Viernes Santo, el silencio del Sábado Santo, y culminarán con la celebración de la Resurrección en la Vigilia Pascual.
La Iglesia invita a vivir este tiempo con devoción, recogimiento y participación activa en cada una de las celebraciones litúrgicas