Crisis en el sector salud de Durango por recortes presupuestales
El sistema de salud en Durango enfrenta una grave crisis debido a los recortes presupuestales aplicados en 2025, que han afectado significativamente la operación de hospitales y clínicas en todo el estado. El gobierno federal redujo aproximadamente mil millones de pesos al presupuesto destinado a salud en la entidad, lo que ha generado desabasto de medicamentos esenciales, insumos médicos y dificultades para mantener los servicios básicos en instituciones como el IMSS e ISSSTE.
Los pacientes crónicos son los más afectados por esta situación, ya que muchos han tenido que interrumpir o retrasar sus tratamientos ante la falta de medicamentos como antibióticos, analgésicos y fármacos para enfermedades como diabetes e hipertensión. Esta carencia no solo pone en riesgo su salud, sino que también impacta la economía familiar, pues muchas personas se ven obligadas a comprar los medicamentos por su cuenta, generando gastos adicionales no previstos en sus presupuestos domésticos.
Las autoridades estatales han reconocido el problema y buscan medidas para mitigar sus efectos, aunque admiten que la demanda de servicios médicos sigue rebasando la capacidad de atención. El gobierno de Durango ha intentado establecer convenios con proveedores alternos y optimizar los recursos disponibles, pero los retrasos en la adquisición de insumos persisten debido a las limitaciones financieras.
Esta crisis se ha extendido por todo el territorio duranguense, afectando tanto zonas urbanas como rurales, donde el acceso a la salud ya era limitado. Pacientes y familiares expresan su preocupación por el deterioro en la calidad de la atención médica, mientras organizaciones civiles exigen soluciones inmediatas que garanticen el abasto de medicamentos y la continuidad de los tratamientos.
Mientras las autoridades trabajan en estrategias para paliar la situación, la población espera que se restablezca el presupuesto necesario para recuperar la operatividad plena del sector salud. La crisis actual evidencia la vulnerabilidad del sistema y la necesidad de priorizar la salud pública como un derecho fundamental para todos los duranguenses.
