En lo que va del año 2024, el estado de Durango ha registrado un preocupante aumento en el número de personas reportadas como desaparecidas, siendo los adolescentes y jóvenes los más afectados. Según datos oficiales, entre septiembre y diciembre de 2024 se presentaron 105 denuncias de desapariciones, con un mayor impacto en hombres de entre 15 y 24 años, aunque también se han reportado casos de mujeres que han permanecido desaparecidas durante varios días. Este fenómeno ha generado alarma entre la población y ha puesto en evidencia la necesidad de fortalecer las políticas de prevención y atención para proteger a este sector vulnerable de la sociedad.
Durango concentra la mayor cantidad de casos de personas desaparecidas en la región, con un total de 711 casos reportados hasta el 16 de mayo de 2024. Este número representa un incremento significativo en comparación con años anteriores, lo que ha llevado a las autoridades y a la comunidad a buscar soluciones urgentes. En municipios como Cuencamé, que ocupa el quinto lugar en desapariciones, se han registrado 23 casos, lo que refleja que este problema no se limita a la capital del estado, sino que se extiende a otras localidades. Estas cifras han encendido las alertas y han motivado a organizaciones y familias a exigir acciones concretas para abordar esta crisis.
Las desapariciones de jóvenes y adolescentes en Durango han dejado al descubierto problemas de fondo que requieren atención inmediata. Entre las causas que podrían explicar este fenómeno se encuentran la falta de oportunidades, la violencia, el crimen organizado y la desintegración familiar. Ante esta situación, es fundamental que las autoridades, en colaboración con la sociedad, implementen estrategias efectivas para prevenir más casos y localizar a quienes ya se encuentran desaparecidos. Además, se necesita una mayor comunicación entre las familias, las instituciones y las organizaciones civiles para crear redes de apoyo y seguimiento que permitan actuar de manera rápida y coordinada.
En resumen, el estado de Durango enfrenta una grave crisis debido al aumento de desapariciones, especialmente entre jóvenes y adolescentes. Con 711 casos reportados en todo el estado y 23 en Cuencamé, este problema ha generado preocupación y ha llevado a la comunidad a exigir acciones urgentes. Es esencial que las autoridades y la sociedad trabajen de manera conjunta para abordar las causas subyacentes de estas desapariciones, fortalecer las políticas de prevención y garantizar la seguridad de los jóvenes. Solo a través de un esfuerzo coordinado y comprometido se podrá enfrentar este desafío y brindar esperanza a las familias afectadas.