Daniel, un joven de 20 años, fue detenido en la calle Gabino Barreda, entre Constitución y Juárez, en la Zona Centro, por drogarse y alterar el orden público. La detención ocurrió cuando el joven se encontraba bajo los efectos de sustancias, sin presentar lesiones visibles ni referidas. Según el certificado médico, su estado de salud indicaba intoxicación por otras sustancias, lo que motivó su remisión para garantizar el orden en la vía pública. La situación se enmarca dentro de un contexto de consumo de drogas en espacios públicos, un fenómeno que sigue afectando a diversas áreas de la ciudad.
Por otro lado, en la colonia Guadalupe, Vicente, de 36 años, fue detenido por alterar el orden público e impedir la correcta prestación de servicios. Su arresto tuvo lugar en la calle Mariano Escobedo, entre 12 de Diciembre y 24 de Febrero, cuando los oficiales lo encontraron bajo los efectos de sustancias, lo que le impedía comportarse de manera adecuada en la vía pública. Al igual que en el caso de Daniel, Vicente no presentó lesiones, y el diagnóstico médico indicó que su condición se debía a la intoxicación por otras sustancias. Este tipo de situaciones, en las que los individuos se encuentran alterados por el consumo de drogas, pone en riesgo no solo la seguridad de los afectados, sino también la de los transeúntes y residentes de las áreas cercanas.
En otro incidente, Ricardo, de 23 años, fue detenido en la colonia Luis Echeverría Álvarez, en el Boulevard de la Juventud, entre la calle Zarco y la Prolongación Pino Suárez. En este caso, Ricardo fue remitido por alterar el orden público, impedir la prestación de servicios e insultar a los oficiales que lo detuvieron. Durante el proceso de ingreso, el joven presentó una abrasión en la región occipital del cráneo, pero, según el certificado médico, su diagnóstico era normal. El comportamiento de Ricardo refleja el nivel de agresividad y alteración que algunas personas muestran cuando se encuentran bajo el influjo de drogas, lo que puede derivar en confrontaciones con las autoridades y generar una mayor preocupación sobre el consumo de sustancias en la vía pública.
Estos incidentes subrayan la necesidad de un enfoque integral en la prevención y el tratamiento de las adicciones, así como el refuerzo de la seguridad en las zonas urbanas donde el consumo de drogas es más frecuente.