A unas semanas de terminar 2025, los fraudes digitales se consolidan como una de las principales amenazas para los duranguenses. Llamadas telefónicas, mensajes falsos, ligas apócrifas, redes Wi-Fi fraudulentas y páginas que simulan ser bancos o tiendas en línea han proliferado en la entidad, dejando a cientos de víctimas sin dinero y, en algunos casos, sin posibilidad de recuperar sus recursos.
De acuerdo con datos de la Fiscalía General del Estado, entre enero y junio de 2025 se registraron 676 denuncias por fraude, de las cuales 460 ocurrieron en la capital, concentrando casi el 70 % del total estatal. Aunque las cifras representan una ligera disminución respecto al año pasado, especialistas advierten que muchos casos no se denuncian, especialmente aquellos que ocurren por vía digital o telefónica.
A nivel nacional, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) reportó que uno de cada cuatro reclamos financieros en Durango durante 2024 estuvo relacionado con posible fraude, lo que equivale a más de mil operaciones sospechosas en un solo año.
Las modalidades detectadas van desde llamadas que informan sobre supuestos cargos no reconocidos o paquetes retenidos, hasta páginas de internet idénticas a las de bancos o tiendas reconocidas. También se ha detectado el uso de redes Wi-Fi falsas en lugares públicos que capturan contraseñas y datos bancarios. En redes sociales y aplicaciones de mensajería circulan enlaces que redirigen a portales clonados o descargan programas maliciosos sin que el usuario lo note.
Autoridades locales han identificado a los adultos mayores como el grupo más vulnerable, debido a que suelen confiar en llamadas o mensajes que aparentan ser oficiales. En algunos casos, se han reportado clonaciones de tarjetas de apoyo social y transferencias no autorizadas después de que las víctimas proporcionan sus datos personales.
Pese a las campañas de prevención impulsadas por instituciones financieras y de seguridad, la evolución de los métodos delictivos dificulta la detección temprana. Los delincuentes emplean logotipos, lenguaje institucional y números telefónicos similares a los de dependencias reales, lo que complica identificar el fraude antes de que ocurra.
Con el incremento de transacciones digitales por el Buen Fin y las compras decembrinas, se recomienda verificar siempre la autenticidad de los sitios web y evitar acceder a ligas enviadas por mensaje o correo. También se aconseja no conectarse a redes Wi-Fi públicas para realizar operaciones bancarias y mantener actualizado el software de seguridad en los dispositivos.