El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en Durango, Raúl Montelongo Nevárez, informó que la informalidad en el estado se mantiene en crecimiento y actualmente alcanza el 55 por ciento. Esto significa que solo el 45 por ciento de las empresas tributan de manera formal.
Montelongo advirtió que este fenómeno representa un problema serio, ya que una gran parte de la población ocupada trabaja sin acceso a seguridad social ni a prestaciones básicas. "Quienes se encuentran en la informalidad carecen de servicios médicos, créditos de vivienda o aportaciones para un fondo de retiro. Es una situación que los coloca en condiciones de vulnerabilidad", explicó.
De acuerdo con el dirigente empresarial, la mayoría de los trabajadores en esta condición se desempeñan en negocios de reciente creación o en actividades económicas que operan sin registro fiscal. Aunque generan ingresos inmediatos, la falta de formalización limita sus posibilidades de crecimiento y restringe el acceso a financiamiento.
Montelongo señaló que el reto es doble: por un lado, incentivar a los emprendedores a formalizar sus negocios y, por otro, diseñar políticas públicas que faciliten el proceso. "La carga fiscal, la tramitología y los costos de registro siguen siendo factores que desincentivan a muchos pequeños negocios a dar el paso hacia la formalidad", apuntó.
El presidente del CCE destacó que la informalidad no solo afecta a los trabajadores, sino también a la economía en general, ya que reduce la recaudación y limita los recursos que pueden destinarse a infraestructura, salud o educación.
En ese sentido, insistió en la necesidad de fortalecer programas de capacitación, esquemas de apoyo para micro y pequeñas empresas y campañas de concientización que muestren los beneficios de la formalidad. "Formalizar un negocio no debe verse como una carga, sino como una inversión en estabilidad y crecimiento", agregó.
El organismo empresarial reiteró su disposición para colaborar con el gobierno estatal y federal en la búsqueda de soluciones que permitan disminuir la tasa de informalidad, con el objetivo de garantizar derechos laborales básicos y construir un mercado más competitivo y equitativo en Durango.