El Instituto Tecnológico de Durango (ITD) cumplió este jueves su tercer día consecutivo cerrado, luego de que el alumnado mantuviera bloqueados los accesos desde el pasado martes. La comunidad estudiantil insiste en la destitución del director, Guillermo de Anda, así como en la falta de transparencia en el manejo de las cuotas escolares y el deterioro visible de la infraestructura.
En este nuevo día de protesta, las y los estudiantes reiteraron que las cuotas ?de 3,000 a 3,800 pesos por alumno en una matrícula cercana a los 6,000? no se reflejan en mejoras. Acusan techos con riesgo de colapso, humedad en múltiples áreas, carencias en laboratorios y baños sin condiciones básicas. Aseguran que el cierre se mantendrá "el tiempo que sea necesario" hasta que exista claridad en el uso de los recursos y se atienda la decadencia del plantel.
El director Guillermo de Anda fijó postura y afirmó que la inconformidad se centra en el estado de las instalaciones, "pero no en la calidad educativa". Señaló que sí se han realizado gestiones, como la adquisición de 400 computadoras nuevas, la construcción de una cancha de usos múltiples, la habilitación de una clínica-lactario para madres estudiantes y la compra de 500 mesabancos.
Subrayó que el Tecnológico opera únicamente con las cuotas escolares, recurso que se destina principalmente a nóminas, intendencia, vigilancia, internet de alta velocidad y servicios básicos equivalentes a "cuatro fraccionamientos". De Anda reconoció que el plantel, con más de 70 años, requiere mantenimiento profundo, pero aseguró que detrás del movimiento existe "un trasfondo político".
Mientras tanto, más grupos de estudiantes se pronunciaron este jueves, acusando que la asociación de alumnos "no los representa" y que ha dado la espalda al movimiento. Afirmaron que la gestión del director, con tres años en el cargo, ha llevado al ITD "en caída", y advirtieron que las instalaciones seguirán cerradas hasta que exista transparencia y una resolución clara al conflicto.