Las lluvias registradas en los últimos días en Durango han generado condiciones más favorables para el campo, aunque aún no son suficientes para garantizar un ciclo agrícola y ganadero estable. Así lo señaló el regidor Pedro Silerio García, quien reconoció que si bien hay avances, todavía falta captación adecuada en los bordos abrevaderos.
De acuerdo con el funcionario, los productores comienzan a ver con esperanza la posibilidad de una recuperación tras meses de sequía. Sin embargo, advirtió que el volumen de agua acumulado en los principales cuerpos de captación sigue siendo limitado. "Muchos bordos se encuentran entre un 20 y un 30 por ciento de su capacidad, aunque hay casos en los que se ha alcanzado hasta un 70 por ciento. Aún falta más", indicó.
La situación es crítica para los sectores agrícola, ganadero y forestal, que han enfrentado severas afectaciones por la falta de lluvias constantes en los últimos ciclos. Aunque las recientes precipitaciones han mejorado el panorama, la irregularidad en la distribución de lluvias no permite aún una evaluación positiva del ciclo.
Silerio García puntualizó que, además del impacto en el campo, la captación insuficiente compromete la disponibilidad de agua para consumo animal y para el sostenimiento de las tierras de cultivo durante los próximos meses. Señaló que se requiere una mayor continuidad en las lluvias para alcanzar niveles óptimos.
En este contexto, las autoridades locales mantienen vigilancia sobre las condiciones de los bordos y el comportamiento del clima, en espera de que julio y agosto presenten mejores registros. La meta es alcanzar una recuperación que permita asegurar alimento para el ganado y garantizar mínimamente la producción agrícola básica.
Por ahora, los productores siguen en espera. Las lluvias han traído cierto alivio, pero aún no representan una solución. El llamado es claro: aprovechar y conservar el agua disponible, ante la incertidumbre de lo que resta de la temporada.