Una familia de la Laguna de Durango vive una tragedia irreparable: una niña de apenas seis años perdió la vida presuntamente a causa de una picadura de garrapata que le transmitió Rickettsia. La menor inició con fiebre alta el 28 de octubre y fue ingresada el domingo 2 de noviembre en el Hospital General de Gómez Palacio, donde el personal médico realizó todos los esfuerzos por estabilizarla, sin éxito. Los primeros indicios señalan que hace aproximadamente una semana la niña había sido mordida por una garrapata. Ayer alrededor de las 17:00 horas se confirmó su fallecimiento; la Vicefiscalía de la Laguna intervino para llevar a cabo las diligencias correspondientes.
Hasta el momento, en lo que va de 2025 en la región lagunera de Durango se han registrado cinco muertes por Rickettsia, y un caso más por confirmarse. Esta cifra contrasta con la percepción pública de que se trata de una enfermedad poco notable y resalta la urgencia de reforzar los protocolos de atención, la disponibilidad de medicamentos y la prevención frente a este vector.
Especialistas advierten que la Rickettsia, transmitida por garrapatas infectadas, frecuentes en zonas con mascotas sin control, vegetación densa y falta de fumigación, presenta letalidad elevada cuando no se diagnostica de forma temprana. Estudios señalan que la clave es la detección rápida y el tratamiento oportuno con doxiciclina intravenosa.
La Secretaría de Salud de Durango ha intensificado los operativos de fumigación, desparasitación de mascotas y campañas de concientización en la Laguna (una de las zonas más afectadas), pero la muerte de esta menor evidenció que aún existen brechas críticas en el sistema de vigilancia y atención. Ahora más que nunca, autoridades y comunidad deberán redoblar esfuerzos para que casos como este no vuelvan a repetirse.