Municipio aplicará medidas estrictas a desarrolladores incumplidos

El gobierno municipal anunció que habrá mano firme para los desarrolladores de vivienda que no cumplan con la normativa establecida, tanto en lo relacionado con los regímenes de condominio como en el proceso de municipalización, informó Norma Miramontes Ayala, directora de Desarrollo Urbano Municipal.

La funcionaria explicó que quienes no respeten la ley no podrán avanzar en sus trámites, y actualmente existen dos casos en esta situación, siendo uno de ellos el fraccionamiento Rancho San Miguel. La medida busca garantizar que los desarrollos cumplan con los estándares de infraestructura, servicios públicos y regularización ante el municipio antes de recibir autorización para continuar con su operación.

En este momento, 45 fraccionamientos se encuentran en proceso de municipalización, explicó Miramontes Ayala. Los trámites están avanzando en distintas dependencias municipales, y durante la presente administración se han concretado dos municipalizaciones exitosas. El objetivo es que los nuevos desarrollos estén correctamente integrados a la estructura urbana y cuenten con servicios básicos como agua, luz, pavimentación y recolección de residuos.

Como parte de la estrategia para reconocer el cumplimiento normativo, la Dirección de Desarrollo Urbano ha comenzado a colocar lonas en los fraccionamientos que cumplen con todos los requisitos. Hasta la fecha, se han instalado 12 lonas, las cuales indican que el desarrollo cumple con los lineamientos municipales y brinda certeza a los habitantes sobre la regularidad de su vivienda.

Miramontes Ayala puntualizó que esta medida busca dar transparencia al proceso de urbanización y garantizar que los desarrolladores no retrasen trámites ni afecten la calidad de vida de los residentes por incumplimiento de normativas. La estrategia también sirve como incentivo para que otros fraccionamientos mantengan orden y regularicen su situación ante las autoridades.

Con estas acciones, el municipio reafirma su compromiso de supervisar la correcta urbanización, regularizar los fraccionamientos y garantizar que los nuevos desarrollos cumplan con los estándares legales y de servicios públicos, protegiendo así la seguridad y bienestar de los habitantes.