Obra tunal ll oportunidad para constructoras

Empresarios de la construcción en Durango integraron un consorcio para participar en la licitación nacional que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) lanzó para la construcción de la presa El Tunal II. El proyecto, con una inversión estimada de 4 mil millones de pesos, representa una de las obras hidráulicas más relevantes para el estado en décadas.

El coordinador del grupo parlamentario del PRI en el Congreso local, Ernesto Alanís Herrera, expresó respaldo político e institucional a los constructores duranguenses. Afirmó que el sector privado tiene la capacidad técnica y operativa para asumir un proyecto de esta magnitud. Subrayó que su participación no solo es legítima, sino necesaria para que parte de los recursos asignados permanezcan en la economía local a través de empleo, compra de materiales, uso de maquinaria y contratación de servicios.

"La decisión de agruparse y competir en igualdad de condiciones puede marcar una diferencia real para la economía de Durango", dijo.

El legislador recordó que la construcción de El Tunal II es un proyecto con más de cinco décadas de gestión, y que su ejecución representa un punto clave para la seguridad hídrica del estado. El embalse permitirá garantizar el suministro de agua potable y liberar volúmenes para uso industrial, lo que podría atraer nuevas inversiones en un contexto marcado por la escasez.

Aunque se trata de una licitación federal, Alanís puntualizó que hay componentes donde se aplica la legislación estatal, principalmente en aspectos laborales y de proveeduría. Indicó que el Congreso local estará atento y en disposición de revisar normativas si eso permite ampliar la participación legal y transparente de empresas locales.

"El objetivo es que esta obra deje beneficios tangibles, no solo infraestructura", declaró. Añadió que el Congreso mantendrá seguimiento puntual para evitar que el proyecto se convierta en una oportunidad perdida para la economía regional.