Un operativo de seguridad movilizó este viernes al mediodía a elementos de la Guardia Nacional, el Ejército Mexicano y la Policía Estatal sobre el bulevar Francisco Villa, una de las vialidades más transitadas de la ciudad de Durango.
La acción, que tomó por sorpresa a comerciantes, automovilistas y peatones, se concentró principalmente en al menos tres lotes de autos establecidos a lo largo de ese corredor comercial, donde las fuerzas de seguridad realizaron revisiones exhaustivas sin que hasta ahora se conozcan los motivos que originaron la intervención.
De acuerdo con testigos, los uniformados arribaron en varias unidades oficiales y cerraron parcialmente el tránsito en algunos tramos para llevar a cabo la inspección. Durante cerca de dos horas, los agentes recorrieron los establecimientos dedicados a la compra y venta de vehículos usados, solicitando documentación y revisando los automóviles que se encontraban en exhibición.
En el sitio también se observó la presencia de personal con armas largas y perros entrenados, lo que generó inquietud entre los propietarios de los negocios y quienes transitaban por la zona.
Algunos vendedores relataron que los oficiales no explicaron el motivo del operativo ni ofrecieron detalles sobre el tipo de investigación que se realizaba, limitándose a revisar los vehículos, revisar números de serie y tomar notas en libretas. Pese al despliegue, no se reportaron detenciones visibles ni aseguramientos de unidades, al menos durante el tiempo que duró la presencia de los elementos de seguridad.
Una vez concluido el operativo, las corporaciones se retiraron sin emitir declaraciones y el tráfico fue restablecido con normalidad. Hasta el cierre de la jornada, ninguna autoridad federal o estatal había emitido un comunicado oficial que confirmara si el operativo formó parte de una investigación específica, de un cateo ordenado judicialmente o de un ejercicio rutinario de vigilancia.
En redes sociales circularon imágenes y videos tomados por ciudadanos que mostraban el momento en que los uniformados ingresaban a los lotes y colocaban cinta amarilla en algunos accesos, lo que incrementó las especulaciones sobre un posible decomiso de vehículos robados o con documentación irregular.
Sin embargo, la falta de información oficial mantiene abierta la incertidumbre entre los comerciantes del sector automotriz y la ciudadanía en general, que continúa a la espera de una aclaración sobre las razones y los resultados de esta operación coordinada realizada en pleno mediodía en la capital duranguense.