Las pandillas en Durango representan un problema creciente que ha generado preocupación entre las autoridades y la comunidad. Este miércoles 26 de febrero, en la colonia Ampliación PRI, se registró un violento incidente en el que un grupo de jóvenes conocido como "los Yepes" agredió a un hombre, quien, según informes extraoficiales, recibió 11 heridas provocadas con un picahielo. Este caso es solo un ejemplo de la violencia que las pandillas están ejerciendo en diversas colonias de la ciudad, lo que ha llevado a las autoridades a implementar estrategias para combatir este fenómeno y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Las autoridades municipales han señalado que están trabajando en conjunto con padres de familia, escuelas y otros órdenes de gobierno para abordar esta problemática. La Ley de Prevención de la Violencia y la Delincuencia en Durango propone estrategias en tres niveles: el nivel primario busca reducir las oportunidades delictivas mediante medidas sociales e individuales; el nivel secundario interviene en grupos de riesgo para modificar conductas antisociales; y el nivel terciario se enfoca en la rehabilitación y reinserción social de quienes han cometido delitos. Estas estrategias buscan no solo prevenir la violencia, sino también reintegrar a los jóvenes en la sociedad de manera efectiva.
Entre las colonias más afectadas por la presencia de pandillas se encuentran Villas del Guadiana, La Virgen, La Morga y Huizache, entre otras. Las autoridades han identificado estas zonas como focos rojos donde los jóvenes se reúnen para delinquir, lo que ha generado un clima de inseguridad entre los residentes. Para enfrentar esta situación, se han implementado operativos de vigilancia y programas de prevención que involucran a la comunidad, con el objetivo de desalentar la participación de los jóvenes en actividades delictivas y ofrecerles alternativas positivas para su desarrollo.
Las pandillas en Durango representan un problema creciente que ha llevado a las autoridades a implementar estrategias integrales para combatir la violencia y la delincuencia. El reciente ataque en la colonia Ampliación PRI, donde un hombre fue agredido con un picahielo, es un ejemplo de la gravedad de esta situación. Las autoridades trabajan en conjunto con la comunidad y aplican la Ley de Prevención de la Violencia y la Delincuencia, que propone acciones en tres niveles: reducir oportunidades delictivas, modificar conductas antisociales y promover la rehabilitación y reinserción social. Colonias como Villas del Guadiana, La Virgen, La Morga y Huizache han sido identificadas como zonas críticas, donde se concentran los esfuerzos para garantizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.
