Durante el periodo vacacional, niñas y niños quedan expuestos a riesgos que suelen pasar desapercibidos: accidentes en el hogar, falta de supervisión, trabajo infantil y aislamiento. Ante esta situación, la regidora Martha Palencia, urgió al gobierno municipal a ofrecer actividades gratuitas y seguras en espacios públicos, especialmente para hijos de familias trabajadoras.
"No todas las familias pueden pagar cursos de verano ni quedarse en casa. Mientras unos descansan, otros trabajan sin red de apoyo. Las vacaciones no pueden ser un tiempo de abandono para la niñez", señaló la regidora.
Pidió que unidades deportivas, bibliotecas y centros comunitarios se activen con programas accesibles, sin costo y con personal capacitado. Advirtió que la ausencia de opciones institucionales agrava las condiciones de vulnerabilidad en las infancias.
Palencia, especialista en salud mental, alertó sobre la sobrecarga emocional que enfrentan madres y padres que no cuentan con apoyos. "Hay quienes deben elegir entre cuidar o trabajar. Eso también repercute en el desarrollo de los menores. Se necesitan alternativas reales para que las familias no enfrenten solas este periodo".
Uno de los puntos más delicados, subrayó, es el incremento de menores trabajando en las calles. "Es común ver a niñas y niños vendiendo dulces o limpiando parabrisas. No es un gesto de solidaridad darles dinero: es normalizar una forma de explotación. Hay que denunciar cuando se detecten estos casos".
La regidora pidió a la ciudadanía involucrarse y no ignorar estas señales. "No es suficiente con señalar el problema. Se requiere acción: desde el municipio, pero también desde la sociedad".
Finalmente, reiteró que el descanso escolar no debe convertirse en un riesgo para la niñez. "El derecho a jugar, estar seguros y desarrollarse no se suspende por vacaciones. Es cuando más deben garantizarse".