Ante el aumento de violencia, robos y actos de vandalismo en distintas zonas de la ciudad, el regidor Antonio Morales ha propuesto que los menores de 12 años que dañen el patrimonio público sean obligados a realizar trabajo comunitario. La medida busca que aquellos que no pueden ser juzgados legalmente asuman alguna responsabilidad por sus acciones.
Según Morales, la propuesta surge como respuesta al crecimiento de estos incidentes, donde menores han sido identificados rayando paredes, destruyendo mobiliario urbano y dañando espacios públicos. Actualmente, por su edad, estos niños no enfrentan consecuencias legales, lo que deja un vacío en la forma de abordar el problema.
El planteamiento contempla que los menores participen en la limpieza de calles y en la restauración de los espacios que hayan afectado. El regidor considera que esto no solo serviría para reparar el daño, sino también para generar conciencia sobre el impacto de sus actos.
Morales destacó que, aunque existen programas de prevención, es necesario tomar medidas más directas ante el vandalismo que afecta a la ciudad. También subrayó la importancia de la participación de los padres y tutores en este proceso, ya que la omisión de cuidados juega un papel clave en la conducta de estos menores.
La propuesta aún debe ser discutida en el cabildo y analizarse con instancias de protección infantil para determinar su viabilidad. Mientras tanto, el vandalismo sigue siendo un problema creciente en distintos puntos de la ciudad, generando preocupación entre ciudadanos y autoridades.
