La mañana de este sábado 25 de octubre, el centro de Durango fue escenario de una manifestación que inició con una convocatoria realizada por familiares y amigos de Anabel Reza, quienes marcharon desde la Plaza de Armas hasta el Hospital Materno Infantil para exigir su aparición.
La mujer, según los testimonios de su hija Perla, fue detenida por segunda ocasión presuntamente por estar relacionada con la desaparición de la menor Judith Alejandra, un caso que ha generado gran preocupación entre la ciudadanía y diversas organizaciones sociales.
De acuerdo con el relato de Perla, la tarde del viernes cuatro vehículos, que presuntamente pertenecían a la Fiscalía del Estado de Durango, ingresaron de manera violenta al domicilio de su madre sin presentar ninguna orden de aprehensión. Los agentes, según afirma, se la llevaron sin explicación y sin permitirles conocer el motivo de la detención.
Al intentar denunciar la desaparición en las instalaciones de la propia Fiscalía, les fue negado el trámite bajo el argumento de que en ese lugar no se encontraba ninguna mujer con las características de Anabel, lo que aumentó la incertidumbre de sus familiares.
La movilización partió alrededor del mediodía desde la Plaza de Armas, donde los manifestantes portaban pancartas y fotografías de la mujer desaparecida. En su recorrido por las principales avenidas del centro histórico, los participantes entonaron consignas pidiendo justicia y claridad en las acciones de la autoridad.
El contingente avanzó pacíficamente hasta llegar al Hospital Materno Infantil, donde se mantenía personal de seguridad y algunos trabajadores observando la llegada de los manifestantes.
Al arribar al área de urgencias, un grupo de familiares exigió hablar con la dirección del hospital, argumentando que buscaban información sobre Anabel y sobre la menor Judith Alejandra, quien habría sido localizada recientemente.
Tras varios minutos de tensión e intercambio de palabras, una comitiva ingresó por la fuerza a las instalaciones, donde finalmente la directora del hospital accedió a dialogar con Perla, hija de la mujer detenida.
Durante el encuentro, el personal médico permitió un breve acercamiento entre los familiares de ambas partes, sin que hasta ese momento se ofreciera una versión oficial por parte de las autoridades de seguridad o de la Fiscalía.
Cerca de la una de la tarde, los manifestantes permanecían aún en el lugar, esperando respuesta y la confirmación del paradero de Anabel. El ambiente era de preocupación y cansancio, pero también de resistencia.
Los familiares aseguraron que no se retirarán hasta recibir información clara y documentada sobre la situación de la mujer, mientras exigieron que se garantice su integridad física y se esclarezcan los hechos ocurridos durante su presunta detención.