El conflicto arancelario entre México y China podría traer repercusiones directas en el sector automotriz local, no solo con un incremento en los precios de las refacciones, sino también con mayores dificultades para conseguirlas. Así lo advirtió Armando Soto Luna, vicepresidente de Talleres Mecánicos de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco).
El representante del sector explicó que la situación ya es complicada en estos momentos debido a la falta de piezas, particularmente en vehículos de origen chino. En muchos talleres los automóviles deben regresar con sus dueños porque las refacciones tardan meses en llegar, lo que provoca retrasos en reparaciones y pérdidas económicas para los negocios.
"Se está visualizando un incremento de costos que va a golpear tanto a los talleres como a los clientes. Se habla de un aumento que podría oscilar entre un 4 y un 12 por ciento, o incluso duplicarse", señaló Soto Luna.
El aumento de aranceles forma parte de la propuesta del Gobierno de México para proteger la industria nacional frente a las importaciones provenientes de países sin tratado comercial, principalmente China. El plan contempla elevar hasta en 50% los gravámenes en automóviles, autopartes y otros productos.
De confirmarse esta medida, los talleres mecánicos enfrentarían un panorama más complejo: no solo tendrían que lidiar con demoras en la llegada de refacciones, sino también con precios más altos, lo que impactaría de manera directa a los automovilistas. El encarecimiento de reparaciones podría convertirse en un nuevo reto para la economía familiar y para un sector que depende del acceso constante a insumos.