Después de tres décadas de operar en condiciones irregulares, el ex Cuartel Juárez finalmente resolvió su problema con el tendido eléctrico, un centro de consumo que había sido catalogado como un riesgo permanente debido a la falta de líneas de conducción adecuadas. Durante ese periodo, se registraron 19 incendios tanto en el interior como en el exterior del inmueble, situación que ponía en peligro a comerciantes y visitantes.
La regidora Verónica Terrones Romero informó que la regularización fue posible gracias a una inversión conjunta que incluyó una aportación de cuatro millones de pesos por parte del municipio de Durango, un subsidio de la propia CFE y la participación económica de los locatarios. Con este esquema, se logró saldar el adeudo acumulado y poner fin a un conflicto que se arrastraba desde hace 30 años.
Terrones destacó que, a partir de ahora, cada comerciante cuenta con un contrato individual y un recibo de consumo, lo que les permitirá pagar directamente por el servicio de energía eléctrica. Esta medida, dijo, no solo garantiza certeza en el suministro, sino que también previene riesgos de sobrecarga e incendios que habían sido recurrentes en el pasado.
El ex Cuartel Juárez es uno de los espacios comerciales más concurridos en la capital y concentra a decenas de locatarios dedicados a distintos giros. La falta de medidores había derivado en conexiones improvisadas que comprometían la seguridad del inmueble y de quienes acuden diariamente a realizar compras.
La regidora subrayó que el trabajo coordinado entre autoridades y comerciantes fue clave para alcanzar la solución, pues se trataba de un problema de alto costo que por años había sido postergado. "Hoy cada locatario tiene certeza de su consumo y se eliminó un riesgo que por décadas se mantuvo latente", señaló.
Con esta acción, el municipio concluye un pendiente histórico y ofrece condiciones más seguras para comerciantes y clientes del ex Cuartel Juárez, donde el servicio de electricidad ahora está regulado y en regla.