Tráiler engancha cables de alta tensión y provoca incendio y apagón

Una maniobra de alto riesgo desató el caos en el suroriente de la ciudad, cuando un tráiler se enredó con cables de alta tensión, provocando un espectacular incendio, la caída de un poste y un apagón masivo que dejó a miles de hogares a oscuras. El conductor salvó su vida por segundos, en un incidente que pudo terminar en una tragedia de magnitudes incalculables.

El accidente ocurrió en el bulevar Enrique Carrola Antuna, a la altura del cruce con la calle Yucatán. El tráiler, conducido por un hombre de aproximadamente 55 años, circulaba con dirección a una tienda de autoservicio cuando, por causas que se investigan, la parte superior de la unidad se enganchó con cables de energía de 13,200 volts, una tensión letal.

La fuerza del impacto provocó la inmediata caída de un poste de luz que se encontraba en la banqueta y, lo más peligroso, generó un incendio en la parte superior del camarote del pesado vehículo. Una lluvia de chispas y llamas iluminó la escena, mientras el tendido eléctrico dañado caía sobre la misma puerta del conductor.

El operador del tráiler actuó con instinto de supervivencia, descendiendo del vehículo de manera inmediata. Su rápida reacción le salvó la vida, ya que segundos después, parte del cableado energizado cayó justo sobre el lugar donde se encontraba, convirtiendo la cabina en una trampa mortal potencial.

Bomberos de Durango arribaron al sitio para enfrentar el fuego, pero la intervención clave fue la del personal de la Comisión Federal de Electricidad, quien tuvo que realizar primero la desenergización total de las líneas de alta tensión antes de que cualquier operativo de extinción pudiera comenzar. Una vez cortada la energía, las llamas fueron controladas.

La consecuencia colateral del accidente fue un apagón masivo. Colonias y fraccionamientos completos del suroriente de la ciudad, como Milenio 450, Carril 200, Vivah Reforma y Galacia, entre otros, se quedaron sin electricidad durante un par de horas, mientras los equipos de la CFE trabajaban para reparar el severo daño a la infraestructura eléctrica, en un recordatorio de lo frágil que puede ser el suministro de un servicio vital.