El presidente ruso, Vladímir Putin, ordenó un alto el fuego unilateral de tres días en Ucrania, que comenzó a medianoche y se extenderá hasta la noche del 10 al 11 de mayo
Este alto al fuego, coincide con las conmemoraciones del 80 aniversario de la victoria del Ejército Rojo sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.
Esta pausa en las hostilidades busca facilitar la realización de las celebraciones en Moscú, donde se espera la asistencia de una treintena de líderes internacionales, incluyendo al presidente de China, así como a mandatarios de Venezuela, Cuba, Brasil y Eslovaquia, entre otros.
Putin ha insistido en que la tregua se mantiene vigente y ha llamado a Kiev a sumarse a esta iniciativa humanitaria, como ya hizo en una tregua anterior durante la Pascua.
Sin embargo, Ucrania ha rechazado esta propuesta, calificándola de maniobra propagandística y exigiendo un alto el fuego más prolongado, de al menos 30 días, que considere una verdadera oportunidad para avanzar en la diplomacia.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha señalado que Kiev no puede garantizar la seguridad de los líderes extranjeros que viajen a Moscú para participar en los actos oficiales, y ha dejado en duda si Ucrania respetará la tregua de 72 horas decretada por Rusia
Además, Zelenski ha acusado a Moscú de responder a sus propuestas con una serie de nuevos bombardeos y ha reiterado que las sanciones internacionales contra Rusia continuarán aumentando, junto con la búsqueda de justicia global.
El Kremlin, por su parte, ha condenado los recientes ataques con drones realizados por el ejército ucraniano contra diversas regiones rusas, incluido Moscú, que han provocado el cierre temporal de aeropuertos y la cancelación o desvío de cientos de vuelos.
Dmitri Peskov, portavoz presidencial, calificó estas acciones como terroristas y afirmó que la negativa de Kiev a aceptar la tregua justifica la continuación de la operación militar especial.
Aunque Putin no ha dado nuevas órdenes específicas sobre los ataques con drones, ha instruido a las fuerzas armadas rusas a responder con firmeza ante cualquier provocación, mientras se toman todas las medidas para que las celebraciones del Día de la Victoria transcurran de forma tranquila y pacífica
La Casa Blanca primero expresó que no apoyaba treguas temporales, sino un cese duradero de hostilidades. Sin embargo, el presidente Trump respaldó la iniciativa de Putin, considerando el alto el fuego de tres días como un paso positivo, aunque limitado