El tema de la Salud destacó en señalamientos de probables irregularidades por parte del Gobierno de Jalisco durante el ejercicio fiscal 2018, último año del exgobernador Aristóteles Sandoval.
La Auditoría Superior de la Federación encontró más de 500 millones de pesos en posible daño a la Hacienda Pública en tres distintas revisiones a la Secretaría de Salud Jalisco, encabezada durante ese periodo por Alfonso Petersen Farah.
El monto más alto señalado por la Auditoría fue por 228 millones de pesos por haber realizado de forma irregular pagos no autorizados de nóminas e impuestos del Seguro Popular, incluyendo gastos del 2015 y 2016.
También fueron señalados más de 84 millones de pesos en pagos injustificados y que no pudieron comprobarse.
Se señalaron más de 46 millones de pesos que recibió el Gobierno de Jalisco pero no se gastó, es decir, fueron de subejercicio, y no fueron reintegrados a la Tesorería de la Federación.
Y en cuanto al personal, se encontraron 31 aviadores tanto en Servicios de Salud Jalisco como en el Hospital Civil de Guadalajara; 78 servidores públicos que recibieron pagos a pesar de estar dados de baja o con licencia sin goce de sueldo; y 47 funcionarios que no acreditaron el perfil del puesto que ocupaban.
PRINCIPALES IRREGULARIDADES DETECTADAS EN SALUD JALISCO (2018):
Las auditorías fueron realizadas sobre la forma en que se ejercieron durante 2018 tres distintas bolsas de recursos federales: el Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud, el Programa de Inclusión Social Componente Salud, y el Acuerdo de Coordinación entre Secretaría de Salud y Jalisco.
En total, las observaciones señaladas por la Auditoría Superior de la Federación por irregularidades durante 2018 que podrían representar un daño al erario público sumaron: $513,641,865.87